A casi dos semanas del comienzo del proceso de reubicación de las familias de la población Aurora de Chile, los habitantes del sector pasaron a ser las mascotas que no se llevaron sus dueños, porque en las nuevas viviendas construidas en Angol no se admitirían animales.

Esta situación contraviene la Ley Cholito, la cual tipifica al abandono de mascotas como un delito.

Para Andrea Soto, representante de la Agrupación Peluditos Callejeros, es lamentable que dicha ley probablemente no solucione el caso, ya que no se conoce a los dueños de los animales.

Por el momento, la organización busca llevar a cabo una reunión con el alcalde o con algún concejal para solucionar el problema.

La agrupación animalista agregó que urge, por tanto, levantar cualquier restricción para el traslado del vecino junto a su mascota o fiscalizar que el animal sea reubicado en otro domicilio.