Autoridades comunales de Coronel solicitaron a la Superintendencia de Medio Ambiente que investigue la fuente de emisión de metales pesados -entre ellos arsénico y níquel– que se encontraron en el organismo de 10 niños de la escuela básica Rosa Medel.
Luego de que se entregara el informe de la Seremi de Salud -que confirma la presencia de de estos elementos- la pregunta que se hacen las autoridades es ¿cuál es la fuente contaminante?
Para responder a esa interrogante, apoderados y autoridades llegaron a la Superintendencia de Medio Ambiente para ingresar una denuncia que genere una investigación y dé luces de qué está generando las alteraciones en las muestras de los menores, según precisó el alcalde coronelino Boris Chamorro.
Misma preocupación es la que tiene la presidenta del Centro de Padres de la Escuela Rosa Medel, Juana Hernández; quien reconoce que están en medio de un sector industrial que se configuró en torno al establecimiento.
En ese contexto, la apoderada pidió “no tapar el sol con un dedo”.
“¿Por qué tengo yo, como ciudadana de Coronel, irme de mi comuna para que queden las empresas? No es justo”, sentenció.
Ingresada la denuncia, la jefa regional de la Superintendencia de Medio Ambiente, Emelina Zamorano, explicó que ahora viene un proceso de revisión de competencias legales.
“(En caso de tener competencia) se encarga una investigación. En caso contrario, nosotros derivamos al organismo respectivo que tenga relación con este tema”, comentó Zamorano.
En 30 días hábiles debiera haber una respuesta, mientras el municipio ya anunció que buscarán paralizar la realización del tercer estudio de metales que se aplicará a menores entre 1 y 4 años, para que se incluya también muestras a adultos mayores de Coronel.
