Comenzó la cuenta regresiva para la sentencia en el emblemático caso por el crimen de 18 campesinos de Mulchén durante la dictadura y la arista Operación Retiro de Televisores. Las víctimas esperan penas de cárcel para los exuniformados acusados por violación de derechos humanos.
Fueron 18 campesinos los asesinados en 1973 en la comuna de la Provincia de Bío Bío, cuyos restos se hizo desaparecer tras la instrucción del Ejército seis años después de los crímenes.
La inhumación y exhumación de las víctimas se enmarcó en lo que hoy se conoce como la Operación Retiro de Televisores.
Tras una extensa investigación, el procesamiento y la acusación contra 15 exmiembros de Carabineros y del Ejército, este viernes el ministro para causas por violación de derechos humanos, Carlos Aldana, puso fin a la etapa del juicio propiamente tal, comenzando la recta final para el fallo de primera instancia.
Los familiares de las víctimas, representadas por la abogada Patricia Parra, esperan que los acusados sean condenados a penas efectivas de cárcel.
Adelantando lo que sería su resolución, el ministro Aldana admitió la alta posibilidad de que el tribunal acoja la petición de las víctimas.
El magistrado confirmó que dentro de la segunda semana de octubre entregaría la esperada sentencia en el llamado caso Mulchén y la arista previamente señalada.
