Apoderados del colegio Carmela Romero de Espinosa en Concepción, criticaron a las autoridades del establecimiento, acusándolas de que intentan asegurar la matrícula para el 2018, bajo el sistema de particular pagado, pese a aún no concretarse su traspaso.

Fue a través de una circular interna, que los padres y apoderados del establecimiento dependiente de las Madres Dominicas de Concepción, se enteraron que la dirección pretende este mes tener claridad sobre su matricula para el próximo año.

“Entenderemos como renuncia al cupo para el año 2018, quienes no respondan ni devuelvan firmado, a su profesor jefe, este documento”, señalan mediante el escrito.

En esa línea, la presidenta del Centro de Padres y Apoderados, María José Ibáñez, afirmó que lo cuestionable es que el recinto aún es subvencionado, por lo que no corresponde exigir a los padres la firma de un documento para resguardar el cupo de sus hijos el 2018.

Los apoderados están molestos con el actuar del colegio y piden que si se modificará la modalidad de la institución, que se concrete de manera paulatina, ya que con los antecedentes que manejan, el arancel aumentaría hasta el doble, llegando a 180 mil pesos mensuales.

En un oficio, el Ministerio de Educación declaró admisible la renuncia a la subvención solicitada por el recinto, sin embargo hizo énfasis que durante todo el 2017 no podrán hacer cobros relacionados con matrícula para el próximo año.