Dos exmiembros de Carabineros fueron procesados como autores del homicidio de un dirigente socialista el año 1973. Tras las notificación, los exuniformados quedaron detenidos en la Sexta Comisaría de San Pedro de la Paz.

Se trata del caso de Mario Avila, militante del Partido Socialista de la comuna de Tomé, asesinado en octubre de 1973, cuyos restos fueron encontrados en el sector de Quebrada Honda en noviembre de ese mismo año.

Por las torturas había sido procesado el cabo en retiro Héctor Aburto, quien esta vez fue notificado por un segundo cargo, el de homicidio calificado, junto a otro exuniformado, Franklin Crisosto.

La resolución fue confirmada por el ministro para causas por violación de derechos humanos, Carlos Aldana.

Ambos exuniformados fueron detenidos y llevados a la Corte de Apelaciones penquista, donde fueron notificados, quedando en calidad de detenidos en la unidad policial de Carabineros en San Pedro de la Paz, sin que apelaran del procesamiento ni solicitando la libertad bajo fianza.

El ministro Aldana explicó que por la pena que lleva aparejado el homicidio calificado, sobre los 5 años y 1 día de cárcel, no podía otorgar la libertad de oficio.

Los restos de Mario Avila habían sido exhumados desde el cementerio de Penco en marzo de 2015, diligencia decretada por el ministro Aldana con el fin de tener la certeza legal que los restos fueron efectivamente los del joven de 27 años al momento de su asesinato, lo que fue confirmado a través de un examen de ADN.