A los 63 años, y producto de un paro cardiorespiratorio, murió en el hospital de Yumbel “La Bombera”, mítico personaje que acostumbraba deambular por el centro de Los Ángeles.

Elsa Irene Véjar Pérez recorría las calles de la comuna caracterizada con un grueso traje azul, bototos, un casco rojo y una gran mochila, vestimenta gracias a la cual se creó su conocido apodo.

Habitualmente pasaba la noche en las inmediaciones de la Primera Comisaria, ubicada en la intersección de la avenida Ricardo Vicuña con Colón. Precisamente fueron los carabineros quienes más lamentaron su deceso.

El suboficial mayor Gerardo Baeza, encargado de la oficina de atención comunitaria, relató que fueron los efectivos policiales quienes gestionaron su traslado al complejo asistencial angelino la semana pasada luego que se descompensara. Según agregó, sienten tristeza porque Elsa era parte de la institución.

La tarde del sábado se determinó su traslado al hospital de la comunidad y la familia de la ciudad santuario, donde falleció a raíz de un paro cardiorespiratorio a las 06:15 horas de este martes, quedando en la memoria de los angelinos su recuerdo.

Mario Herrera, presidente de la Corporación de Monumentos Históricos de Los Ángeles, destacó la figura de “La Bombera” como un personaje típico de la zona y la recordó como una mujer que vivía en su propio mundo, a veces huraña, pero parte importante de la comuna.

En su estadía en el hospital de Los Ángeles, Elsa Véjar dejó más de un millón 700 mil pesos en efectivo, cuyo destino es incierto, a la espera que aparezcan sus familiares.