Algunos pasajeros de la línea Eme Bus, que habían comprado sus pasajes con anticipación, se quedaron con los boletos en la mano, el sábado recién pasado, luego del cambio de horario, puesto que la empresa seguía trabajando con la hora de verano.

A las 00:20 horas estaba fijada la salida del último bus de la línea EME, desde el terminal Collao el día domingo 14, y debido al cambio de horario -que comenzó a las 00:00 horas- salió una hora antes. Esto provocó que algunos pasajeros se quedaran esperando o tuvieran que comprar pasajes en otra línea.

La razón, indican, es que en el terminal se rigieron por la hora antigua y las personas que en realidad creían llegar unos minutos antes, estaban retrasadas.

Oscar Lariaga, quien viajaba junto a su familia a Santiago, compró un pasaje a las 00:20 y cuando llegó 15 minutos antes, se percató de que el bus ya se había ido, razón que lo llevó a comprar nuevamente 4 pasajes en otra línea.

El afectado también manifestó que estas son cosas que deben ser explicadas por el terminal y que no le entregaron ninguna solución inmediata.

Desde EME Bus, en la oficina del terminal Collao, el supervisor Juan Carlos Ñuñez, explicó que estas situaciones siempre suceden cuando se cambia la hora, y que ante esto, los pasajeros deben informarse bien.

“Lo que más tratamos es explicarle a los pasajeros, que se les vende pasajes después de las 12 de la noche (el día del cambio de horario), que la empresa sigue trabajando con la hora antigua”, detalló Ñuñez.

De esta forma, todas las personas que se quedaron sin llegar a su destino u optaron por otra opción de viaje, deben acercarse a la sucursal de EME y pedir la revalidación de su pasaje, indicaron.