Una reunión de coordinación con las policías, la Fiscalía, la Defensoría y la seremi de Justicia sostuvo la presidenta de la Corte de Apelaciones de Concepción, ministra Patricia Mackay, de manera de adoptar las medidas que eviten la repetición de hechos de violencia como los del 14 de julio pasado, cuando el Juzgado de Garantía y Tribunal Oral de Cañete fue apedreado.

El objetivo del encuentro, explicó la magistrada, es que quienes intervienen en la administración de justicia puedan advertir situaciones de riesgo, de manera de permitir que los jueces no sean amedrentados nuevamente y puedan ejercer su labor con plena seguridad e independencia.

Por la gravedad de lo ocurrido hace tres semanas, indicó la ministra Mackay, el Poder Judicial tomó las medidas que les compete, entre ellas el reforzamiento de la seguridad y el control de quienes ingresen a los tribunales, por ejemplo.

En la reunión participaron también jueces de Cañete, quienes relataron las situaciones bajo las cuales trabajan, especialmente las que se viven durante las audiencias que dicen relación con las causas por el conflicto mapuche y la violencia rural en la zona de Arauco.