La primera querella, por uno de los menores de Coronel en cuya sangre se detectaron altos niveles de metales pesados, fue presentada en el Juzgado de Garantía, pidiendo a la Fiscalía determinar el origen de la contaminación y sancionar a los responsables.

La acción legal fue ingresada por el abogado Andrés Durán, quien representa a una niña parte del grupo de 18 menores, en cuyo organismo la Seremi de Salud del Bío Bío detectó metales pesados a niveles por sobre los permitidos.

El profesional señaló que con la querella “se persigue la investigación del delito de lesiones graves”, dado que se detectó la presencia de arsénico.

En el escrito, si bien se apunta a quienes resulten responsables de la contaminación que ha generado la presencia de contaminación en la comuna de Coronel, se individualiza a las empresas Endesa y Essbio, por la posibilidad de que los metales pesados provengan de la contaminación generada por las termoeléctricas Bocamina y/o el agua que suministra la sanitaria y que capta de la laguna Quiñenco.

Consultada sobre la acción legal, Essbio informó a través de un comunicado que del total de agua que se produce para Coronel sólo el 10% es extraída desde la laguna y además que el líquido es sometido a exhaustivos controles.

La querella fue acogida a trámite ya por el Juzgado de Garantía y remitida a la fiscal Ana María Aldana, que investiga desde hace cuatro años la contaminación en la comuna coronelina.