Un gran número de personas, entre ellos figuras políticas, participaron en la “jornada de reflexión” convocada por el Arzobispado de Concepción, en busca de detener la aprobación del proyecto que pretende despenalizar el aborto en algunas causales.

“Celebra la vida” fue el slogan que encabezó la concurrida manifestación pública, que aseguran busca generar “conciencia” y así evitar que se apruebe el proyecto sobre el aborto, impulsado por el Gobierno, que hoy se discute en el Senado.

El arzobispo de Concepción Fernando Chomalí rechazó nuevamente la postura del Ejecutivo y del Congreso en torno a este tema. “Que piensen muy bien los legisladores lo que están haciendo, porque ese proyecto es la puerta abierta para el aborto libre. Los dramas humanos, que existen y reconocemos, se resuelven de otra manera, no eliminando a inocentes”, señaló.

Poder político al que emplazó Chomalí; pero que sin embargo, también estuvo presente en esta manifestación, con posturas claras en rechazo al proyecto de aborto. Entre ellas estuvo la Senadora por la UDI Jacqueline van Rysselberghe, quien afirmó que este proyecto es carente de “sentido común”.

“Hay personas que plantean el aborto libre como un mecanismo de anticoncepción. Si alguien no quiere quedar embarazada, que tome anticonceptivos, pero no mate un ser que está por nacer”, afirmó la senadora.

Otro de los presentes fue el Diputado DC Jorge Sabag, histórico adversario de esta iniciativa impulsada por su propio Gobierno, asegurando que que este puede ser un punto de quiebre entre la Nueva Mayoría y la Falange.

“En la medida que nuestros socios de la Nueva Mayoría no nos respeten en nuestra diversidad, en nuestra identidad humanista cristiana, se va a ir produciendo una grieta”, dijo el parlamentario, agregando que “es un panorama complejo para un conglomerado que pretende tener continuidad”.

A esta jornada llegaron centenares de personas asegurando estar “esperanzados” en que la oración detenga la aprobación de esta ley.

Esta manifestación culminó con una misa, en donde los participantes pidieron al Gobierno “no insistir” con la ley de aborto que despenaliza esta práctica en tres causales; violación, inviabilidad del feto y riesgo vital de la madre.