11.500 cajetillas de cigarros, avaluadas en más de $33 millones, fueron incautadas desde dos locales comerciales en San Felipe.
Se trata de marcas internacionales que no se distribuyen en Chile, y que eran vendidas por una madre y su hijo, de 67 y 33 años respectivamente.
Los acusados fueron inicialmente detenidos por la Brigada Investigadora de Delitos Económicos Los Andes de la PDI, por el delito de infracción a la ordenanza aduanera.
Aún se investiga qué punto fronterizo usaron para ingresar los artículos al país, según lo señalado por el comisario Oscar Mena de la Bridec.
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Los detenidos no contaban con antecedentes policiales anteriormente, y los antecedentes de esta investigación fueron puestos a disposición del Ministerio Público de San Felipe.