Las dependencias del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) en Valparaíso llevan 59 días en toma por parte de expresos políticos de la zona.

Sus demandas se relacionan directamente con reparación y justicia, donde acusan al Gobierno de no flexibilizar su postura.

Roberto Maturana, uno de los participantes en la manifestación, dijo que tiene una amarga sensación de que el Gobierno está esperando a que se mueran. “La sensación que nos da a nosotros es que nos estamos muriendo de a poco”, aseguró.

Además de dar cuenta de una de las 10 demandas que han levantado en torno a la huelga, Juan Carlos Muñoz, vocero de los manifestantes, denunció que el director regional del INDH habría solicitado el desalojo de las dependencias.

Los manifestastes aseguraron que se mantendrán en el lugar hasta obtener respuesta a sus demandas, reiterando que la única forma en que dejarán el edificio será con la fuerza publica, ante lo que calificaron como un abandono por parte del Ejecutivo y -en especial- de las administraciones que siguieron al régimen militar.