Las principales agrupaciones ambientalistas de la región de Valparaíso analizaron la sorpresiva renuncia del ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier.

Coinciden en que la nueva autoridad deberá abordar las tareas pendientes, aunque a tan poco de terminar el mandato de esta administración, probablemente no sea mucho lo que se pueda hacer.

Andrés León, de la agrupación Dunas de Ritoque, dijo que solo la semana pasada el Ministerio habría cometido uno de los errores más graves, a juicio de la organización, al no integrar al Minsal en la norma de emisiones de CO2.

Salvador Donghi, biólogo y ambientalista, sostuvo que hay tareas pendientes con la Ley de Biodiversidad y con el plan de descontaminación para el cordón industrial de la región.

En este último punto, dijo Donghi, la preocupación se centra en que el nuevo ministro ha manifestado una postura contraria a lo que plantean las agrupaciones ambientales, respecto a las facilidades que se les están otorgando a las empresas para endosar responsabilidades a terceros.

La diputada Andrea Molina señaló que llama la atención la salida tan abrupta del ahora exministro, donde la única explicación es una estrategia política, considerando que queda tan poco para el término del gobierno.

Respecto a lo netamente político administrativo, los representantes de agrupaciones ambientalistas indicaron que probablemente no hayan cambios en la seremía regional de la cartera, considerando que restan pocos meses para el término de esta administración.