El único imputado por estrangular y matar a una joven de 24 años en Quillota en noviembre de 2016 quedó en prisión preventiva, luego de una modificación en sus cautelares.

El día del crimen, el imputado confesó que había estrangulado y matado a su pareja, Johana Abigail Soto Alarcón, joven de 24 años que al parecer presentaba un embarazo de tres meses.

El imputado se encontraba internado en el hospital Psiquiátrico de Putaendo a la espera de exámenes médicos que arrojaran si tiene o no patologías que le impidieran enfrentar un juicio.

Además del cambio de cautelares, el Ministerio Público ordenó muestras biológicas a la víctima y el feto para cotejar si se tratase de un hijo del imputado. De ser así, se configuraría además del delito de femicidio, el de parricidio.

“La pena que arriesga es de 15 años y un día hasta prsidio perpetuo, explicó el fiscal de Quillota.

La prisión preventiva la deberá cumplir en la cárcel de Limache bajo medidas de protección especial, ya que ha sido amenazado.

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