El ministro de Defensa, José Antonio Gómez, se refirió a la investigación contra al menos nueve marinos por instalar cámaras ocultas y grabar a sus compañeras de la fragata Almirante Lynch.

Los uniformados instalaron las cámaras en un dormitorio del personal femenino, en puntos estratégicamente seleccionados, y luego compartieron las imágenes a través de un grupo de WhatsApp y otras redes sociales.

Junto con condenar el hecho y tildarlo de “gravísimo”, el secretario de Estado recordó el gran esfuerzo realizado para lograr que a las Fuerzas Armadas se integren mujeres.

“Ésta es una situación que se está investigando, pero desde el punto de vista del Ministerio de Defensa y el Gobierno, vamos a actuar con la mayor rigurosidad para que hechos de esta naturaleza no se repitan y que existan las sanciones para que sea ejemplarizadoras”, agregó.

De acuerdo al Código Penal y a la Justicia Militar, las sanciones irían de los 61 días a los 5 años de presidio en el caso de ser condenados por el crimen.

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Asimismo, Gómez anunció que existe un sumario en curso, donde pueden ser castigados con la baja y otras sanciones que se establecen en el ámbito administrativo.

El ministro confirmó que el autor principal del caso está preso y los demás involucrados fueron dejados en libertad, aunque con el procesamiento en desarrollo.

Se trata de al menos nueve marinos, cuyos grados van de marineros hasta un sargento, y quienes fueron denunciados a inicios de diciembre.

En la audiencia que se realizará el próximo jueves, el Ministerio Público buscará que a los responsables se les mantenga el procesamiento.

Por último Gómez enfatizó que si bien estos graves hechos involucran a marinos, son individuales y no deben enlodar el trabajo de la institución.