Corbiobio inició una ofensiva en defensa del presupuesto 2018 de las regiones de Bío Bío y Ñuble. La entidad convocó a diversos actores a la elaboración de un resumen ejecutivo que llevarán al Congreso con las principales indicaciones acerca de este tema.

Desde el sector privado se han recogido principalmente las propuestas y planteamientos que fueron incorporadas en el documento, y que el director de Corbiobío, Andrés Cruz, aseguró que llevarán al Congreso el 20 de noviembre, y serán incorporadas en la discusión en sala por la bancada regionalista.

Lo que se plantea fundamentalmente es informar la ejecución presupuestaria trimestral diferenciada hasta que entre en funcionamiento la Región de Ñuble, considerar para ambas regiones presupuestos separados por glosas y programas diferentes, y un aumento de la inversión pública de la Región del Bío Bío en un 10% sobre Inflación.

A los gremios productivos de la zona también les inquieta el tema y estarán preocupados del avance de esta materia, según expresó Ricardo Gouet, presidente de la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción.

El documento impulsado por Corbiobio establece que la instalación de Seremis en Ñuble debe ser escalonada y responder a una transición entre los equipos de ambas regiones. Además, los nuevos equipos deben ser proveídos por Alta Dirección Pública.

El presidente del Consejo Regional del Bío Bío, Emilio Armstrong, señaló respecto del presupuesto de la región de Ñuble que la delegada presidencial, Lorena Vera, debe elaborar una propuesta.

Los participantes concordaron respecto de la inversión del Fondo Nacional de Desarrollo Regional, que la reducción presupuestaria debería ser proporcional a la distribución de la población.

Si se descuenta el peso poblacional de Ñuble, que representa un 22%, la Región del Bío Bío pasaría a contar con 88 mil millones de pesos y la Nueva Región quedaría en 25 mil millones de pesos.