Lo que para los argentinos puede resultar algo normal, en Chile es calificado como delito. Bajo este contexto, una pareja transandina, que al intentar trasladarse desde Río Gallegos a Río Grande, fueron detenidos y formalizados por mantener en su poder gran cantidad de municiones.

De acuerdo a los primeros antecedentes de la detención, el subcomisario del departamento de Extranjería de la Policía de Investigaciones, Javier Müller, señaló que junto a personal de Aduana y previa instrucción del Ministerio Público lograron incautar gran cantidad de municiones.

“Alrededor de las 21.40 horas del lunes recién pasado, se logró la detención de dos ciudadanos extranjeros, quienes ingresaron a territorio nacional portando entre sus pertenencias 140 municiones calibre 22 largo de caza menor, y 1426 postas de 5 milímetros”.

Junto con esto, portaban un electroshock que es controlado por la ley de armas, además de dos machetes de grandes dimensiones, tras lo cual quedaron detenidos para su control de detención”.

Tras su detención, en la tarde del martes se realizó la audiencia de control de detención y formalización de la investigación en contra de Héctor Adrián Zúñiga y María Isabel Soto Villarroel.

En concreto, fueron fiscalizados a bordo de una casa rodante que se trasladaba desde Río Gallegos a Río Grande. Si bien ambas localidades son argentinas, para ir de una a otra debían ingresar obligadamente a Chile por el Paso de Integración Austral en Monte Aymond.

Tras la audiencia, la pareja recuperó su libertad mientras que el plazo para el cierre de la investigación se fijó en 50 días. Sin embargo, los transandinos quedaron con la medida cautelar de arraigo regional; es decir, no podrán retornar a su país, a menos que paguen una fianza de 2 millones y medio de pesos.

Además, se fijó una audiencia para el próximo 14 de junio a las 11:00 horas, el día en que se les realizará un procedimiento abreviado.