Desde la Corporación Nacional Forestal (Conaf) constataron la actual situación de contaminación y daño ambiental que está enfrentado la zona que en el próximo futuro será el nuevo Parque Nacional Kawésqar, pero que por ahora es parte de la reserva local.

Se trata de un territorio de 2,8 millones de hectáreas, el parque más extenso de la red existente en la Patagonia chilena, pero que no está en la mejor situación que se podría esperar.

Según informa el único guardaparques de la Conaf en la zona, Jovito González, el borde costero de la actual reserva nacional Alacalufe (creada en 1969) presenta acumulación de basura, plásticos, redes, toldos y ranchos en más de 100 puntos, consigna Diario El Mercurio.

“Hay mucha basura, arrojan todo al agua. Incluso hacen cambio de aceite y eso igual va al agua”, dice.

González agrega que lo anterior se genera a partir de los más de 2 mil pescadores que visitan el lugar al año y que utilizan la costa para quedarse.

Estos últimos, además, talan árboles en la reserva, señala González, para hacer fuego y abrigarse en la zona.

La falta de fiscalización por parte del Estado es una de las principales razones explica el guardaparques, debido a un presupuesto que no incluye más personal en terreno.

Actualmente cuentan con $8 millones anuales y gran parte de ello está destinado a la única lancha que utilizan para navegar las aguas del futuro parque.

Lo anterior ha sido informado a las autoridades precisa González, pero todavía no hay una solución concreta; según el profesional, son la Armada y el Sernapesca quienes deberían cuidar este aspecto y no la Conaf.

En tanto, la reserva pasará próximamente a ser el Parque Kawésqar: una vez que la revisión de los decretos, por parte de Contraloría, finalice.