En prisión preventiva quedó este miércoles un hombre imputado de 36 años, quien fue denunciado por la violación de una niña de 13 años en Punta Arenas, región de Magallanes, bajo el pretexto de que era una “relación sentimental”.
Según lo informado por la fiscal Wendoline Acuña, los hechos denunciados habrían comenzado el 1 de junio de este año, en circunstancias que el acusado comenzó una supuesta relación sentimental, incluyendo encuentros sexuales supuestamente consensuados, con la niña.
Sin embargo, legalmente no existen las relaciones consentidas entre un adulto y un menor de 14 años.
El imputado, Samuel Antonio Raipane Mancilla, conoció a la menor en su lugar de trabajo, ya que la madre de la niña trabaja en el mismo establecimiento, y durante el último tiempo la llevaba a este debido a problemas conductuales que tenía la adolescente, consignó Diario El Pingüino.
Raipane ya tenía pareja y 5 hijos, por lo que al iniciar los encuentros con la menor, y ser descubierto por su expareja, fue expulsado de su hogar.
La madre de la menor se enteró de esto y recibió a Raipane, compañero de trabajo, en su casa, por lo que vivió junto a la niña de 13 años por varios días; periodo en el cual el abuso se habría gestado sin conocimiento de la mamá de la adolescente.
Fue justo en este tiempo que el acusado le pidió permiso a la madre de la menor para invitar a su hija al Carnaval de Invierno junto a sus propios hijos, para luego en septiembre salir sólo con la madre en Fiestas Patrias, intentando acercarse a ella en estado de ebriedad.
Tras esto, Raipane fue expulsado de la casa por la madre, quien ya se había dado cuenta del abuso que cometía en contra de su hija.
Durante este periodo fue cuando, además, se realizó la primera denuncia por parte de una profesora del establecimiento educacional donde estudia la menor. Fue esta quien descubrió los hechos en la vía pública e informó a las autoridades pertinentes.
Con estos antecedentes, el acusado fue formalizado por el delito de violación impropia reiterada en calidad de autor. La fiscal Acuña solicitó la medida cautelar de prisión preventiva y a pesar que el abogado defensor Marcos Ibacache se opuso pidiendo una medida menos gravosa, el juez Juan Enrique Olivares decretó la cárcel preliminar para el imputado por 90 días. La pena que arriesga el acusado por este delito va de los 5 años y un día a los 20 años de presidio.
Los hechos fueron admitidos por ambas partes, Raipane y la menor, en las audiencias realizadas.
