Por medio de la Cámara de Diputados, el parlamentario por el Distrito 53 Bernardo Berger, ofició a la Dirección Nacional de Gendarmería y a la Junta Nacional de Jardínes Infantiles (Junji) para que expliquen lo que asegura es un proyecto que genera alarma en la comuna de Río Bueno.

Esto, por el jardín infantil Miraflores que se está construyendo con recursos públicos en el marco de la meta presidencial de construcción de jardínes y que se encuentra adosado al muro perimetral de la cárcel de dicha comuna.

Berger explicó que es entendible la necesidad de inversiones, pero que éstas también deben tener una lógica, priorizar el bien común y sobre todo la seguridad.

Es por eso que el parlamentario precisó que ofició a la Dirección Nacional de Gendarmería, pero especialmente a la Junta Nacional de Jardínes Infantiles, para que se explique cuáles fueron los criterios para poner en una situación innecesaria, de extremo riesgo a niños en edad preescolar, precisando que le da la sensación de que el Gobierno está más preocupado de cumplir metas sectoriales y de tener recintos parados al término de esta administración que de velar por lo realmente importante que debe convocar el Estado en materia de infancia.

El parlamentario recordó que la cárcel de Río Bueno, cuenta con un historial de motines y fugas por lo cual, a su juicio “no hay que ser un genio” para darse cuenta a los peligros a los que podrían estar expuestos los menores y educadoras.

Sumado a esto, los trabajos del jardín infantil Miraflores se encuentran paralizados luego que la Dirección de Obras Municipales no entregara los permisos de edificación correspondientes por superposición de terrenos, donde la mitad del lugar donde se construye es del Serviu y la otra mitad de Bienes Nacionales, razón por la que se detuvo la obra hasta que la situación sea subsanada.