Toma ilegal afecta a empresa Essal y pone en riesgo suministro de agua para todo Panguipulli, según la compañía. Operarios no pueden entrar a la planta y esperan acciones del Estado tras oficios enviados y reuniones con la Gobernación de Valdivia.

Para la compañía es un hecho grave lo que ocurre en la planta captadora y de producción de agua potable, ubicada en el sector Tranguil.

El predio de dos hectáreas y media comenzó a ser ocupado de forma ilegal desde el 18 de octubre, asentamientos que han proliferado en los últimos días, según confirmó el gerente general de Essal, Hernán Köning.

La acción es un riesgo sanitario tanto para las 15 mil personas de Panguipulli, por la imposibilidad de realizar muestreos y todas las certificaciones para la entrega de agua potable, como para los ocupantes del terreno privado, debido a la presencia de elementos químicos y por la instalación de pozo negros e intervención en el lugar.

El alto ejecutivo de la empresa sanitaria dijo que esta toma ilegal pone en riesgo la continuidad del servicio para Panguipulli.

Köning manifestó que también hay riesgos para los operarios de la planta, que por intentar realizar sus faenas han sido agredidos.

La empresa ha interpuesto tanto una denuncia en la fiscalía local de Panguipulli, una querella y un recurso de protección, por las acciones que les han provocado perjuicios, pidiendo protección de Carabineros y -a través de oficios y reuniones- una acción concreta del Gobierno, lo cual siguen esperando.

El gerente general de Essal dijo esperar que cada ente del Estado y las autoridades pertinentes y con las que han hablado cumplan su rol, y sopesen lo que está ocurriendo, y poder superar esta a su juicio grave situación.

El representante de ESSAL reiteró que están muy preocupados y expectantes de que se tomen las medidas, para poder garantizar el servicio a todo Panguipulli.