La fiscalía local de Valdivia ordenó la destrucción 157 máquinas tragamonedas incautadas en 2013 a tres comerciantes que las operaban de forma ilegal en sus respectivos locales.

Tras el juicio oral, efectuado en marzo de este año, la sentencia contemplaba -entre otras- esta medida, por el delito de explotación de casas de juego casino instalados en el sector céntrico de Valdivia, como lo confirmó el fiscal del caso Juan Pablo Lebedina.

Las máquinas destruidas son parte de las 222 tragamonedas incautadas desde ocho locales, en julio de 2013.

Las restantes ya habían sido eliminadas con anterioridad, por disposición de sus dueños, quienes accedieron a medidas alternativas de cumplimiento de pena.