Tras 20 años de espera, 30 familias del sector Cahuala, en Chonchi, accedieron al agua potable.

Hasta hace un par de días las familias dependían de camiones aljibes o esperaban que se registraran precipitaciones para recolectar agua lluvia.

Luego de largos años de espera y de precarias condiciones, accedieron al anhelado servicio de abastecimiento.

Teresa Piticar, dirigenta del comité para el progreso de Cahuala, se mostró emocionada con el proyecto.

“Es un tremendo logro, un agua muy saludable (…) ni en un sueño se me pasó por la mente”, dijo. Añadió que por primera vez tomarán un vaso de agua con tranquilidad.

El intendente subrogante, René Garcés, detalló que existió un trabajo entre varios actores para concretar la iniciativa.

La autoridad subrayó que la comunidad no tuvo agua potable durante 20 años y que la donación de un vecino fue fundamental para revertir esta situación.

El proyecto ejecutado por la Gobernación de Chiloé benefició a 150 personas y la inversión fue de $35 millones.