Cerca de 400 denuncias por estafa y uso fraudulento de tarjetas de crédito recibió en 2017 la Policía de Investigaciones (PDI) de Osorno.

En enero de este año, ya se registran cerca de 40, lo cual habla de que se trata de un delito recurrente y de constante cambio.

El jefe de la Brigada de Delitos Económicos de la policía civil, Juan Carlos Estay, hizo ver que las estafas tienen como epicentro a internet, llegando a 137 casos en 2017. La venta de productos o arriendo de inmuebles son los principales argumentos de enganche.

Pero el delito más denunciado es el de uso fraudulento de tarjetas bancarias, con 154 denuncias el año pasado. Ahí es de suma importancia la responsabilidad del usuarios, pues traspasa datos privados, para posteriormente enterarse de que con ellos se han realizados compras en diversos puntos, incluso en el extranjero.

También llamó a estar atentos a las cuentas que se entregan para depositar dineros, pues en general se repiten.

El uso fraudulento de tarjetas o cheques ha provocado que incluso se formen bandas especializadas en ello, que además de convencer a las personas de entregar datos privados de carácter financiero, también comenten el hurto para, por ejemplo, robar cheques y posteriormente intentar cobrarlos en los bancos.

La semana pasada se detuvo a una mujer por tal delito, que intentó cobrar cerca de 2 millones de pesos en Purranque. El propietario era de Frutillar y reconoció que no sabía cómo le sustrajeron los documentos bancarios.