Esta semana se cumplen 9 meses desde que las faenas del nuevo cuartel de la Policía de Investigaciones en Osorno se mantienen paralizadas, luego que la empresa que se adjudicó la licitación -Ingeproc- abandonó las obras.

La molestia fue planteada por la consejera regional María Angélica Barraza quien lamentó la falta de prolijidad de la actual administración regional al minuto de licitar las obras, considerando dijo, que ésta empresa ya tenía faenas paralizadas en otros puntos del país.

De esta forma, se exige a contar de éstos hechos que el Ministerio de Obras Públicas antes de entregar cualquier tipo de obra en la zona, se preocupe por averiguar a quién se la adjudica, para no encontrarse con sorpresas en el camino.

Por eso es que incluso se ha solicitado al MOP que se tenga un registro de contratistas pero cuyas faenas y responsabilidad estén garantizadas. Afortunadamente en éste caso los dineros están resguardados, pero los recursos son para utilizarse y ejecutarse, no para tenerlos resguardados, añadió.

Respecto al bajo presupuesto ejecutado en la provincia de Osorno éste 2017, la consejera por la zona señaló que “tristemente nos hemos topado con obras retrasadas”, siendo tres las más emblemáticas la del relleno sanitario en Curaco, el cuartel de PDI y la ejecución de obras en el liceo Antulafquén, que estuvo paralizado por aproximadamente un año.

Lamentablemente -dijo- una vez que el cuerpo colegiado aprueba la asignación de dineros regionales, todo pasa a manos de los organismos pertinentes y éstos no tienen la obligación de informarles como va el desarrollo de la mismas “y cuando preguntamos, nos dan pildoritas”, dijo.

Por todo lo anterior, finalizó diciendo, tienen la esperanza que el próximo gobierno -independiente del color político- sea más responsable al minuto de adjudicar proyectos multimillonarios y emblemáticos como el nuevo cuartel que debía albergar a los detectives que por años trabajan hacinados en las dependencias de calle Amtahuer.