A 12 años de presidio efectivo fue sentenciado un osornino que según se acreditó durante el juicio, violó en reiteradas oportunidades a su cuñada, una niña menor de 14 años. El hombre se valió de trastorno de personalidad para manipular tanto a la menor como a su familia.

Frente a la pena se refirió el fiscal Guillermo Cáceres quien se mostró satisfecho por los resultados obtenidos, ya que el mismo entrega la sensación de justicia en favor de la víctima, toda vez que se ajustó al tramo más alto que se podía aplicar.

Asimismo dijo, para poder entender y plasmar el contexto de las vejaciones sufridas por la niña y cuya familia jamás advirtió -hasta que la pareja del imputado lo encontró abusando de ella es que se realizó el peritaje psiquiátrico, el cual fue clave para comprender la facilidad que tuvo el sujeto para manipular a toda una familia y de esa forma nunca levantar sospechas.

Consultado el persecutor por la demora en la ejecución del juicio oral, ya que los hechos fueron denunciados en 2014, Guillermo Cáceres explicó que ello se debió a que tras ser sorprendido ultrajando a la niña, huyó en dirección desconocida manteniéndose en calidad de prófugo de la justicia hasta inicios de 2016.

Ahora bien, cabe mencionar que son diez días los que se le brindan a los intervinientes antes de ordenar la ejecución de la sentencia, instancia que puede en este caso ser aprovechada por la defensa del condenado para recurrir ya sea por la nulidad de la sentencia o del juicio como tal.