“La ciudad tranquila que era Puerto Octay murió”, es la dura conclusión de los vecinos tras el robo frustrado a la sucursal de BancoEstado. La alcaldesa por su parte, criticó la falta de recursos con que cuenta Carabineros.

La comuna con mayor distribución territorial de la provincia de Osorno y que cuenta con un 70% de ruralidad, se vio convulsionada con la acción de una banda delictual que vino a demostrar que la delincuencia que hasta hace un tiempo sólo se veía en otros puntos del país, también llegó hasta la apacible localidad.

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Con sus mas de mil 900 personas en su cono urbano, Puerto Octay vio un ajetreado operativo policial, con el único carro operativo de dos con los que cuenta Carabineros dado que uno de ellos tiene un desperfecto mecánico.

El carro habilitado protagonizó una cinematográfica persecución que incluyó disparos, cierre de rutas y la prohibición de circular por calle Pedro Montt producto de un violento asalto perpetrado en la única sucursal de BancoEstado.

De hecho varios vecinos fueron testigos del atraco y las voces de preocupación no se dejaron esperar, donde los residentes temen que éste caso golpee los esfuerzos de ofrecer una localidad turística y sobre todo segura.

La sucursal BancoEstado tiene 15 años y paradojalmente la apertura de sus puertas estuvo marcado por otro robo, pero en esa oportunidad sin violencia.

La ubicación de la entidad bancaria esta a poco mas de una cuadra del centro, donde funciona el edificio de la municipalidad, el mismo al que como todas las mañana debe dirigirse su alcaldesa Maria Elena Ojeda.

En esta oportunidad, le toco ser testigo en primera persona de un episodio que incluyó disparos afuera de su casa en el sector de Quilanto.

La edil dijo que una de las lecciones que se sacan de este hecho es la necesidad de reforzar la labor de Carabineros, especialmente en materia de vehículos policiales, en una comuna territorialmente amplia y que por esencia tiene un potencial turístico.

Por ahora los vecinos de Puerto Octay esperan que se trate de un episodio aislado y que permita repensar el concepto de seguridad que queda en entredicho con éste tipo de ilícitos que claramente instaló la preocupación en sus habitantes.