Neumáticos desgastados, parabrisas trizados y otras falencias encontró personal fiscalizador de la Seremi de Transportes al realizar una visita inspectiva al terminal de buses en Osorno a propósito de un nuevo fin de semana largo.

La idea era chequear las condiciones en las que los proveedores del servicio de transporte -especialmente interprovincial- cumplen con las disposiciones de seguridad y en función de ello, responder al aumento en la demanda que se genera en tres días de descanso para muchos.

El inspector fiscal de la Seremi, Sergio Nuñez Jara, indicó que lamentablemente se encontraron situaciones preocupantes en cuanto a la seguridad que se debe entregar a la hora de ofrecer sus servicios de traslados.

Pero la vigilancia no solo apunta a buses interprovinciales, dado que existe una realidad riesgosa que se genera especialmente en el servicio de transportes a localidades aledañas por la sobrecarga de pasajeros, lo que desde la unidad de fiscalización se dijo debe ser denunciado a fin de establecer planes de controles aleatorios que eviten dicho escenario.

Desde Carabineros, se comprometieron fiscalizaciones durante los próximos días, de manera estratégica a fin de alcanzar a distintos sectores de la zona, en la idea de evitar la ocurrencia de accidentes.

En otra mirada a la fecha y pese a sumar un día mas el fin de semana a propósito del feriado religioso de San Pedro y San Pablo, en un recorrido realizado en el terminal de buses de Osorno, se comprobó que no existía una demanda significativamente notoria, lo que se reflejó en la disposición aún para la venta de pasajes para los destinos habitualmente más demandados, como Concepción y Santiago.