Sernapesca de la región de Los Lagos presentó una querella criminal en contra de un locatario de la Feria Libre Rahue en Osorno.

Lo anterior, por mantener especies en veda a la venta, las que tras ser sometidos a análisis se comprobó que mantenían altos índices de toxina paralizante, producto de la Marea Roja.

Personal de la institución y de Carabineros concurrieron hasta la pescadería del recinto, donde fiscalizaron que los comerciantes contaran con los permisos correspondientes y con los certificados que acreditaran la procedencia de los alimentos.

Fue en ese contexto que fueron encontradas 390 unidades de loco, cuya extracción está prohibida. Los que tras ser incautados fueron sometidos a un análisis que confirmó que estaban contaminados con Marea Roja, indicó el director regional de Sernapesca, Eduardo Aguilera.

El informe emitido por el Centro Regional de Análisis de Recursos y Medio Ambiente (Ceram) de la Universidad Austral de Chile, alertaba que las muestras mantenían 121 microgramos de toxina, a pesar de que el límite es de 80.

Aguilera señaló que además de los moluscos en veda, se incautaron 30 kilos de merluza del sur y 40 kilos de congrio dorado, que no mantenían acreditación legal.

La autoridad afirmó que se exige esta documentación para acreditar que los productos fueron extraídos en zonas seguras, libres de Marea Roja, en el caso de los moluscos. Además, sostuvo que el retiro indiscriminado perjudica a quienes se dedican de formalmente a la pesca artesanal.

Eulalio Martínez, dueño del local donde se habrían encontrado las especies, aseguró que solamente mantenía una docena y media de locos, y que lo demás correspondía a otro tipo de molusco.

Martínez agregó que de haber tenido realmente el veneno paralizante, él y su esposa habrían resultado intoxicados, porque habían consumido media docena del molusco antes de la legada de los fiscalizadores.

Respecto a la querella criminal interpuesta en su contra, el comerciante aseguró que se trata de una represalia por su actitud, ya que intentó impedir la fiscalización días antes.

El comerciante agregó que esperarán la citación correspondiente, pero se manifestó tranquilo, ya que insiste en que los moluscos encontrados no eran de la variedad Concholepas concholepas.

En relación a la presencia de uniformados durante la fiscalización, el director regional de Sernapesca explicó que en estos procedimientos se hacen acompañar de Carabineros, quienes en esta oportunidad -al ver la reacción de los locatarios- solicitaron refuerzos, lo que causó el enojo de los osorninos.

La autoridad insistió en que si una persona hubiese consumido el producto contaminado podría haber muerto y sostuvo que se trata de un tema delicado que no puede ser tomado a la ligera, por lo que serán tajantes en el momento de fiscalizar.