La indignación ciudadana por las bajas pensiones ya está instalada, por lo que es previsible que más antecedentes la vayan incrementando.

Datos como los recientemente revelados por BioBioChile, que daban cuenta de que al menos 40 ex ministros de estado mantuvieron o mantienen algún vínculo con alguna Aseguradora de Fondos de Pensiones AFP sólo vienen a agravar este descontento social.

En la publicación, se detalla los cargos que ocuparon e incluso ocupan, por ejemplo la actual ministra de Trabajo Ximena Rincón o el de Energía Máximo Pacheco. También el del anterior ministro de Sebastián Piñera y actual presidente de la Asociación de AFP, Rodrigo Pérez Mackenna.

Pero también aparecen nombres como el de Osvaldo Puzzio, Fernando Leniz, María Eugenia Wagner, José Antonio Viera-Gallo, Eduardo Aninant, Jaime Estevez, Jpsé de Gregorio, Carolina Shmidh, María Eugenia Benitez, Pedro Pablo Errázuriz y varios otros, hasta llegar a un total de cuarenta, sin distinción de color político, pues al parecer eso no corre a la hora de los negocios.

Datos que vienen a confirmar una opinión común en la ciudadanía y que es la vinculación directa entre el poder económico y el político, donde mucha novedad no hay pero que sigue indignado los chilenos, más aún cuando ven sus pensiones.

Y quizá por eso no han cambiado las leyes, al menos eso piensa Juan Moreno, presidente en Osorno de la Asociación de Dializados.

Menos aún se va a confiar si es que en la actualidad las pensiones siguen siendo bajas, incluso más que una asistencial. Tal como en el caso relatado por Rosita Guzmán, dirigente de las manipuladoras de alimentos, quien tiene una colega recientemente jubilada. Tras toda una vida de trabajo, su pensión apenas sobrepasada los 85 mil pesos.

Para cambiar la confianza en las acciones gubernamentales y estatales en la materia, se necesitan otras medidas más profundas y radicales que mejorar el actual sistema de pensiones basados en las AFP.