Con un trabajo de enrocado en el borde del río Voipir se busca evitar el deslizamiento de tierra, el cual mantenía en riesgo de derrumbe a varias viviendas en la localidad de Ñancul, en la comuna de Villarrica.

El alcalde Pablo Astete dijo que el monto invertido alcanzó los 90 millones de pesos, dinero que fue aportado en su totalidad por el Ministerio de Obras Públicas.

Según Astete, la situación de peligro quedó en evidencia en el invierno pasado, en el perímetro de la población Los Coihues.

El trabajo, cuya ejecución quedó a cargo de la dirección regional de Obras Hidráulicas, está en su etapa final.