La Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de la PDI detuvo en Arica a una mujer de 26 años, como la principal sospechosa de golpear y dejar con lesiones a su hijo tres años de edad.

Entre otras marcas cutáneas, el menor quedó con una notoria huella plantar de una zapatilla de adulto en su espalda.

La agresión fue descubierta y denunciada por el padre del niño, quien ese día había llegado hasta la casa que el menor y su madre comparten en el sector Cerro Chuño, para hacer una visita a su hijo y salir con él.

De acuerdo a los antecedentes recabados por los detectives, la presunta agresora habría reconocido su responsabilidad ante el padre y la abuela paterna del niño, señalando que se enojó con él “porque se portó mal”. Sin embargo, la inculpada guardó silencio ante la policía.

Las lesiones del menor fueron constatadas en el Hospital Regional Doctor Juan Noé Crevani, donde los médicos diagnosticaron “hematoma y contusión en el hombro derecho, espalda y región abdominal”.

Procedimientos judiciales

En el Juzgado de Garantía de Arica, la imputada enfrentó una formalización por el delito de lesiones menos graves en el contexto de violencia intrafamiliar.

Este caso deberá resolverse en un juicio simplificado el 23 de marzo, pues la madre no reconoció responsabilidad en los hechos. En el intertanto, quedó sujeta a la medida cautelar de firma mensual.

En relación a la violencia que ocurre hoy al interior de las familias, la jefa de la Brisexme Arica, comisario Andrea Villalba, reveló que aún existe la creencia en muchos padres que los hijos pueden ser corregidos a través de los golpes.

El año 2016 la Brisexme llevó a cabo en Arica 98 diligencias relacionadas con el delito de lesiones leves en contexto de violencia intrafamiliar, entre órdenes de investigar de la justicia, denuncias, detenidos, instrucciones particulares y órdenes verbales de la Fiscalía.