Gonzalo Calderón es el nombre de un pequeño de 7 años que tras una intervención quirúrgica dental a cargo del Servicio de Salud de Antofagasta terminó con una hipoxia isquémica cerebral de por vida; al menos, según la versión de su familia, que ahora buscará justicia en los tribunales.

Conforme lo dicho por la familia calameña, en el 2014 Gonzalo habría sido víctima de un mal procedimiento, sufriendo un paro cardiorrespiratorio que terminó en el diagnóstico señalado, impidiendo que al día de hoy -y para siempre- tenga una correcta oxigenación y circulación de sangre en su cerebro, provocando una disminución de sus función mental, memoria y control de movimientos.

Ante esta situación, la familia del menor ha decidido interponer una demanda en contra del Servicio de Salud de Antofagasta, por un monto de los 2 mil 250 millones de pesos, tal como lo señaló el medio local SoyCalama.

Juan Carlos Ugalde, abogado de los afectados, dijo al citado medio que se trata de una acción que busca indemnización de perjuicios en contra el servicio a cargo del Hospital Carlos Cisterna. Los actos, aseguró, los habría cometido un sólo funcionario que en ese momento dependendía del recinto.

La cantidad requerida se dividiría de la siguiente manera: mil 500 millones para Gonzalo Calderón, principal afectado por la negligencia, 500 millones para su madre Sandra Guarda y 250 millones para la hermana del niño, Nataly Guarda. Lo anterior, debido a que son éstas últimas quienes cuidan a Gonzalo las 24 horas del día.

La hermana del menor dijo a SoyCalama que “esperamos que se pueda hacer justicia por Gonzalito y por muchas otras negligencias que han sucedido y se han callado. Queremos darle una mejor vida a mi hermano, la que se merece tras esta gravísima negligencia que truncó la vida de un niño lleno de alegría, bailarín y juguetón. Sabemos que ni con toda la plata del mundo nos devolverán a nuestro travieso Gonzalo, pero al menos mejoraría la calidad de vida de un niño inocente que cayó en manos de un ineficiente”.