Como un balde de agua fría calificaron en el palacio de La Moneda, las declaraciones del exmandatario respecto al momento político que atraviesa la administración de Michelle Bachelet.

Ricardo Lagos, a quien las encuestas sitúan como una de las figuras mejor evaluadas del oficialismo para regresar a la presidencia en 2018, realizó un crudo análisis, asegurando que ésta es la peor crisis política e institucional desde que tiene memoria.

Consultado sobre un “vacío de poder” que no ha logrado llenar Bachelet, Lagos respondió que “parece haberlo” y que por eso el horizonte presidencial se adelantó.

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Sus declaraciones incomodaron en La Moneda, siendo el vocero Marcelo Díaz quien abordó el tema. El ministro se enfocó sólo en confirmar que el Gobierno de Bachelet comparte con Lagos, en que actualmente existe una crisis, pero aseguró que ellos trabajan para resolverla.

Sin embargo, evitó referirse al “vacío de poder”. De hecho, ante las reiteradas consultas, expresó que la visión sobre el rol de la presidenta era una mera interpretación a las declaraciones de Lagos.

No obstante, Marcelo Díaz llamó “a todos” a elevar el contenido del debate, pero con propuestas.

El candidato del PRO, Marco Enríquez-Ominami, reaccionó a través de su cuenta de Twitter, cuestionando la entrevista: “Candidatos tentados por estilo de Trump de decir que país está en crisis y ellos son los salvadores. Chile quiere un mejor futuro, no volver al pasado”, escribió.