Una escasa posibilidad de éxito es la que vaticina el ministro secretario general de Gobierno, Marcelo Díaz, al proyecto de reforma constitucional de diputados de la Unión Demócrata Independiente para impedir el matrimonio entre personas del mismo sexo y que éstas puedan realizar trámites de adopción de niños.
La iniciativa apunta a modificar el inciso 2° del artículo 1° de la Constitución Política de la República: “El matrimonio constituye únicamente el vínculo entre un hombre y una mujer sobre el cual se erige preponderantemente la sociedad. Es contrario a las normas de esta Constitución la adopción de menores ejecutadas por parejas de un mismo sexo”, señala el cambio que proponen los parlamentarios.
“A mí me parece, primero, que no tiene ningún destino. Es una reforma que requiere un alto quorum y yo estoy convencido de que no habrán en el Congreso votos suficientes para aprobar algo que me parece simplemente inaceptable“, señaló el vocero.
A su juicio, esta acción busca “impedir que Chile siga avanzando en un camino de reconocimiento de su diversidad” y que sigue el contrario a lo que los chilenos manifiestan.
Para el ministro, el objetivo que busca la iniciativa para legislar en torno al matrimonio igualitario desde el oficialismo es “permitir que los derechos de todos puedan ser reconocidos” y no “impedirle nada a nadie”.
