Hasta la sede del Congreso Nacional en Santiago llegó el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Las Américas de La Florida, Miguel Olate y Catalina Magaña, vocera de la sede de Santiago Centro.

Esto último, para dar cuenta de los efectos que ha tenido en el plantel el lucro que evidencian los informes elaborados por el ministerio de Educación, respecto de esa institución y las demás universidades del grupo Laureate, como son la Universidad Andrés Bello y de Viña del Mar, y que fueron dados a conocer por Radio Bío Bío.

Olate sostuvo que los documentos son contundentes, dando cuenta de una realidad que muchas veces fue negada por los directivos de la UDLA, agregando que ya no existen dudas de que las tres universidades del grupo Laureate lucran.

El vocero de la sede La Florida emplazó al ministro de Educación, Gerardo Varela, a recibirlos y escuchar de primera fuente los efectos que ha tenido para la calidad de sus carreras y los costos que significan para el plantel los contratos por supuestos servicios educacionales que aplica Laureate, mecanismo por el cual se hace el retiro de millonarias utilidades sin el pago de impuestos.

“No estamos dispuestos a ser una próxima Universidad del Mar”, afirmó, además de exigir que se les invite a exponer en la Comisión de Educación.

Catalina Magaña, vocera de la sede de Santiago Centro, explicó que estos contratos han terminado siendo un menoscabo para la calidad, poniendo como ejemplo la situación que debieron enfrentar sus compañeros de la carrera de Técnico en Educación Física.

Aquello, luego de que debieran hacer un examen en la calle por el cierre de su centro deportivo.

Además, acusó a las autoridades actuales y pasadas del Mineduc de no haber sabido fiscalizar el lucro, tratándolos “una vez más” como estudiantes de segunda categoría.

Los dirigentes criticaron además la falta de apoyo que han recibido por parte de la Confech, a quienes les solicitaron un espacio el día de la marcha para exponer su problemática como “los enfermos terminales del lucro”.

El diputado de Revolución Democrática y exdirigente estudiantil, Miguel Crispi, sostuvo que esta es una problemática que debe involucrar a todos y pidió a la Confech que se generen los espacios para aquello.

“El problema de la educación en Chile, del alto gasto, de la estafa sistemática de endeudar a los estudiantes para después no poder terminar carreras o terminar con títulos que al final tienen poco peso, eso es un problema de toda la ciudadanía”, señaló.

Los estudiantes de la UDLA sostuvieron que buscan también articularse con las federaciones en la Universidad Andrés Bello y de Viña del Mar, a fin de generar un bloque común ante la revelación de los informes del Mineduc sobre el mecanismo para lucrar que usa Laureate, por medio de sus instituciones.