Hasta 160 millones de pesos semanales obtenía como ganancia un grupo conformado por tres ciudadanos haitianos, un chileno y un peruano, imputados por los delitos de tráfico de migrantes y asociación ilícita para la trata de personas.

Fue una investigación de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Occidente con la Brigada en Contra de la Trata de Personas la que descubrió este lucrativo negocio.

Ejerciendo una función de captadores y aprovechando que una de las agencias tenía sede en Puerto Príncipe, en Haití, los imputados ofrecían a los interesados cancelar cerca de 1.400 dólares por un paquete que incluía todo lo necesario para ingresar a Chile, como lo explicó la subprefecto Cinthia Contreras, de la Unidad en Contra de la Trata de Personas de la PDI.

No era extraño ver precisamente en muchos de estos vuelos arribados Chile a haitianos portando un sobre color amarillo con esta documentación y el dinero.

Hasta este momento, la Fiscalía ratificó 48 de esto casos. Sin embargo, el Ministerio Público indaga un listado de al menos 4 mil, donde se ratificaban las millonarias ganancias que obtenía esta organización, como lo indicó la fiscal Paola Zárate.

La Fiscalía inició la investigación en las agencias Smandy Life Tour, Quisquella y Fusion Travel, deteniendo junto a los tres haitianos y el ciudadano peruano, al chileno Roberto Torres quien insistió en la transparencia de su negocio.

Todos los detenidos fueron imputados por los cargos de asociación lícita para el tráfico de migrantes y delito de tráfico de migrantes.

Paralela a la formalización, los imputados han debido enfrentar a cientos de ciudadanos haitianos que exigen la devolución del dinero, luego de la entrada en vigencia de las nuevas normativas de ingreso al país dispuestas por el Gobierno.