El presidente Sebastián Piñera presentó el lunes las indicaciones al proyecto de Ley de Migración y Extranjería que presentó por primera vez en 2013, destacando, entre otras medidas, la creación de instancias especiales y la restricciones para ciudadanos haitianos.
Ayer martes ingresó el documento de 32 páginas a la Comisión de Gobierno Interior de la Cámara de Diputados, incluido el informe financiero elaborado por la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda, el cual reveló que su implementación costaría $2.415 millones, precisó El Mercurio.
En el desglose, el monto comprende $2.300 millones para implementar el Servicio Nacional de Migraciones -una de las medidas propuestas- y $114 millones para otros gastos. Por ejemplo, el arriendo de inmuebles para uso de la PDI en el norte.
El mismo escrito precisó que en la actualidad el gasto por migrantes sería de US$ 256 millones, es decir, 154 mil millones de pesos, considerando un poco menos de un millón de extranjeros; destinados a salud, educación e institucionalidad.
El mandatario presentó indicaciones para, según él, garantizar la migración “ordenada, segura y regular”, puesto que la normativa vigente estaría “obsoleta”.
Piñera aseguró que se busca terminar con los ingresos ilegales, asegurando que “ha llegado el momento de poner orden en este hogar que compartimos”.
Las modificaciones más llamativas fueron sobre los ciudadanos haitianos, para quienes habrá más restricciones. A partir del 16 de abril habrá una visa consular de turismo simple para haitianos que quieran venir con fines de recreación, pero sin propósito de migración, residencia o actividad remunerada, la cual durará por 30 días.
Asimismo, se indicó la puesta en marcha de una visa con fines humanitarios, la cual debe solicitarse en el Consulado de Chile en Haití y permitirá la residencia durante 12 meses. Será el primer paso para una posible residencia definitiva y comienza a regir el 2 de junio. También se apuntó que habrá un límite.
