Fueron 136 las infracciones que se cursaron a buses interurbanos durante los controles de la Dirección del Trabajo el pasado fin de semana santo, las que comprenderían multas por más de $271 millones en total.

Además, 15 trabajadores fueron suspendidos de sus funciones.

Esto fue parte del saldo que dejaron las 328 fiscalizaciones realizadas entre el 29 de marzo y el 4 de abril, de las cuales el 41% terminó con multas por distintos motivos.

Éstos serían principalmente “no llevar correctamente el registro automatizado de asistencia, vulnerar el sistema excepcional de jornada y superar el límite máximo de 5 horas continuas de conducción”, especificaron desde el Ministerio del Trabajo.

El subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, calificó la cifra como “alta”, por lo que consideran que es “necesario hacer también campaña preventiva para abordar el tema con las empresas y los trabajadores”.