Por más de dos horas se reunieron el canciller Heraldo Muñoz, con su sucesor, Roberto Ampuero, en el marco de las reuniones que se han desarrollado previo al cambio de Gobierno del próximo 11 de marzo y de cara a los alegatos orales sobre el diferendo marítimo con Bolivia, en La Haya.

En la cita, el actual jefe de la diplomacia nacional explicó que repasaron aspectos relativos al funcionamiento diario del Ministerio, la agenda de política exterior, y medidas como los programas de protección oceánica además del Acuerdo Transpacífico, que sería firmado este mes.

Sin embargo, Muñoz reconoció que la discusión se extendió al momento de discutir el juicio con Bolivia en el Tribunal Internacional, agenda que ha sido seguida de cerca por el futuro jefe diplomático.

“Estuvimos juntos en París el día 19 y 20” relató Muñoz, agregando que “tuvimos la oportunidad de que el pudiera interiorisarse de los argumentos que vamos a presentar en los alegatos orales, en el caso de la obligación a negociar”.

Por su parte, Roberto Ampuerto, enfatizó que la política de Estado es trascendente a los gobiernos de turno, calificándola como un punto donde “nos encontramos los chilenos”.

En este sentido, ratificó que su misión como canciller será “defender los intereses más altos del país”, dejando en claro que la prioridad desde el inicio de su gestión estará puesta en los litigios internacionales que el país mantiene con Bolivia, tanto por los límites, como así también por las aguas del Silala.