El Senado podría discutir la eliminación de la facultad del Tribunal Constitucional para ejercer control preventivo sobre las leyes, de forma voluntaria u obligatoria.

Al menos así lo solicitaron los congresistas Isabel Allende (PS), Alfonso De Urresti (PPD) y Juan Pablo Letelier (PS), quienes presentaron la iniciativa durante la sesión ordinaria del pasado tres de enero, por lo que sería la próxima legislatura la encargada de analizarla.

En el texto, los legisladores explicaron que el TC actúa como “un legislador negativo,
mediante la cual diez jueces derrotan la voluntad de una comunidad política”.

Y es que durante el último año el Tribunal Constitucional desempeñó un rol fundamental en la discusión de proyectos emblemáticos del Gobierno, como la Ley que despenaliza la interrupción voluntaria del embarazo entres causales, iniciativa que se jugó su viabilidad ante el cuerpo de ministros.

Por ello, los senadores precisaron que la revisión a la normativa buscaría “terminar con la absoluta falta de control sobre la conducta de los miembros del TC”, instalando la posibilidad que puedan ser fiscalizados y acusables constitucionalmente.

En esta línea, la reformulación también buscaría disminuir el período de 9 a 5 años en el ejercicio del cargo de los miembros, “lo que parece más adecuado al principio de responsabilidad y control sobre las autoridades en cualquier democracia”.