Este miércoles Bolivia dio inicio a las Jornadas del Mar, en medio de la conmemoración de la pérdida al acceso al Océano Pacífico. El presidente altiplánico, Evo Morales, pidió unidad y participar de la confección de una bandera gigante.

En ese contexto, Morales dio inicio a la agenda de actividades que se extenderá hasta el 28 de marzo, día en que finalizan los alegatos orales en la Corte Internacional de Justicia por la causa marítima en contra de Chile, que ya lleva alojada en ese tribunal por 5 años.

Acompañado de su vicepresidente, Álvaro García, y su canciller, Fernando Huanacuni, el presidente de Bolivia indicó que la actividad principal será la confección de una bandera gigante que se extenderá desde La Paz hasta Oruro, por lo que pidió que se confeccionen banderas de 10 por tres metros, que se unirán el 10 de marzo. Morales
espera que sea la más grande del mundo.

Luego, el líder de la nación vecina, reiteró su llamado a la unidad y aseguró que la reivindicación marítima de su país es irrenunciable.

Ante este “banderazo”, el canciller Muñoz normalizó la situación y dijo que es decisión personal de cada país este tipo de acciones. Luego, reiteró que chile ha optado por el camino de la paz durante todos los años posteriores a la Guerra del Pacífico y cuestionó criticas de otros países hacia el conflicto, que apuntan a Chile como un país conflictivo.

Este jueves comenzarán en Boivia y Holanda, las reuniones bolivianas de cara a definir los cursos de acción en el juicio por su salida al mar y por las aguas del río Silala.

El lado contrario de la moneda se vive hoy en Antofagasta, donde se conmemora su incorporación al territorio chileno.