Un 37% de las casas migrantes están compuestas sólo por extranjeros, lo que en cifras implica que en 111 mil hogares migrantes viven chilenos: un 63% del total.
Lo anterior, de acuerdo al informe sobre el “Factor migración: su efecto en la nueva familia chilena” desarrollada por el Centro de Desarrollo Económico Local y la Facultad de Derecho de la Universidad Central.
“Esto confirma lo que siempre hemos sostenido, que no hay diferencia y somos todos parte de una gran familia humana porque compartimos la misma dignidad. Y justamente el hecho de que se conformen familias mixtas lo muestra, así como al establecerse lazos de amistad o lazos laborales. Mientras nos abrimos a interactuar con ellos hay más integración, y eso lo vemos a diario en la realidad. Lamentablemente, lo que hace noticia son los hechos de exclusión”, dijo a La Tercera Pablo Valenzuela, director nacional del Servicio Jesuita a Migrantes.
En tanto, el ministro de Desarrollo Social, Marcos Barraza, recalcó que “en la práctica sí se está produciendo una integración. Sin embargo, está faltando más inclusión social ya que en la población inmigrante es donde más pobreza multidimensional existe”.
