Esta noche se realizará el segundo y último debate presidencial antes del balotaje.

El foro de la Asociación Nacional de Televisión de Chile (Anatel) promete mayor tiempo de interacción entre los candidatos, quienes deberán responder preguntas sobre ocho ejes temáticos.

La instancia comenzará a las 22:30 horas y se desarrollará en dependencias de TVN. El candidato de Chile Vamos, Sebastián Piñera; y el abanderado del oficialismo, Alejandro Guillier, se “enfrentarán” por una hora y 45 minutos.

Educación, Pensiones, Economía y Seguridad son algunos de las temáticas que se analizarán. Ambos aspirantes a La Moneda deberán responder preguntas a cargo de cuatro periodistas representantes de Chilevisión, Mega, TVN y Canal 13.

En esa línea, tendrán dos minutos para responder las consultas y seis minutos de interacción entre ellos sobre uno de los ocho temas a tratar.

En la previa, el candidato oficialista dijo esperar una respuesta de Piñera sobre la reducción administrativa de las listas de espera en el Hospital San José en su gobierno.

En tanto, el candidato de Chile Vamos indicó que espera marcar las diferencias de ambos proyectos de gobierno en el debate televisivo.

Escenario a días del balotaje

Luego de que en primera vuelta poco más de 6 millones 650 mil chilenos acudieran a las urnas -representando tan sólo un 46% del padrón electoral- expertos coinciden en que nadie puede predecir lo que sucederá en el balotaje del próximo domingo.

Diversos analistas políticos coinciden en el escenario de “incertidumbre” y aseguran que la abstención será crucial a la hora de definir al próximo gobernante.

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Marco Moreno, decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad Central, calificó esta elección como la de mayor incertidumbre debido a la incógnita de la abstención. Gonzalo Muller, académico de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo, vislumbra que Piñera pueda sumar votos de otros conglomerados.

Durante la segunda vuelta de 2013, cerca de 1.000.000 menos de chilenos acudieron a ejercer su derecho a voto, con un 59% de abstención. Algo que en esta oportunidad, aseguran los analistas, podría incluso aumentar.