En el Gobierno salieron a defender con todo la implementación de la política de gratuidad tras el drástico cambio de opinión del candidato presidencial de Chile Vamos, Sebastián Piñera, quien ahora comparte la iniciativa, en su afán por conseguir los votos que le permitan ganar en segunda vuelta a Alejandro Guillier, quien ya se había comprometido con aumentarlo al 70% de estudiantes más vulnerables.
Pese a la defensa del Ejecutivo, la verdad es que la gratuidad universitaria está lejos de quedar consagrada en una ley como fue la promesa de La Moneda, ya que el proyecto de Educación Superior sigue durmiendo en la comisión de Educación del Senado.
Consultada la ministra de Educación, Adriana Delpiano, sobre alguna autocrítica del Gobierno por no tener aún aprobada esta iniciativa, al igual que el proyecto de Universidades del Estado, lo descartó y anunció que esta semana le colocará urgencias a ambas iniciativas legales. Aseguró que está esperanzada en que queden establecidas como ley.
Más allá de las esperanzas de la ministra, según el calendario de trabajo del Congreso para esta semana, ninguno de los proyectos está en tabla para su discusión o votación. Es más, la comisión de Educación del Senado, donde está la iniciativa, ni siquiera está citada.
Igual suerte corre el proyecto de universidades estatales, aún en primer trámite constitucional en la Cámara de Diputados y que tampoco figura en tabla esta semana, y por el cual aún persisten las críticas de parte de los rectores del Consorcio de Universidades del Estado, como lo expresó su presidente, Ennio Vivaldi, a propósito de la negativa del Gobierno para aumentar la matrícula de estas instituciones.
Además, planteó que le gustaría ver una mayor apertura para dialogar en el tema.
A pesar del escaso tiempo legislativo que queda, una segunda vuelta presidencial a tres semanas y un Congreso en vías de renovación, desde el Gobierno insisten que tendrán aprobados ambos proyectos.
