La cuenta pública del Hogar de Cristo dio cuenta de una cruda realidad a nivel nacional, puesto que, según datos de la fundación, 77.554 niños no están estudiando.

“En Chile hay alrededor de 77 mil jóvenes excluidos del sistema escolar, pero ellos no son desertores. La deserción escolar es un pésimo concepto que denota un acto voluntario de abandono de una institución por una reflexión de interés personal”, indicó Paulo Egenau, director social del Hogar.

“Estos menores no salen voluntariamente, sino que son excluidos porque las condiciones de su entorno no están dadas para hacerse cargo de todo lo que significa nacer y crecer en pobreza”, explicó Egenau a La Tercera.

De acuerdo a las cifras de la fundación, 188.939 menores de 21 años no están en clases y, obviamente, no han terminado la enseñanza media. “Chile no cuenta con una provisión educativa de reingreso para aquellos niños que han sido excluidos del sistema”, aseguró.

“El sistema educacional tiene que entender y trabajar a partir de la realidad de estos niños y eso no se está dando”, sentenció.