El domingo comenzó a regir la denominada “ley del saco”, la cual regula el peso máximo que pueden cargar las personas de manera manual. En la construcción, vega, minería y otros rubros, los hombres no podrán levantar más de 25 kilos, a diferencia de antes que el límite era 50. Para el caso de las mujeres y los menores de 18 años, se estipuló un máximo de 20.
La ministra de Trabajo y Previsión Social, Alejandra Krauss, catalogó esta medida como un gran avance en protección social, porque no se entendía cómo los trabajadores seguían cargando tanto peso.
Krauss, además, declaró que el ente encargado de fiscalizar, la Dirección del Trabajo, no ha recibido denuncias a cinco días de su entrada en vigencia. A pesar de ello, enfatizó en que quienes la infrinjan, arriesgan multas que van desde las nueve a 60 UTM.
Adolfo Campusano, coordinador de gestión del Instituto de Seguridad Laboral, comentó que de esta manera se evitará una serie de problemas de salud relacionados a las cargas y valoró que Chile se alineara a las estándares internacionales.
Rosa Soto, jefa del departamento de Prevención de Riesgo del Consorcio Cosal Kalam, reconoció que es un avance, pero que aún existe un rechazo por parte de los trabajadores, porque ahora deben hacer más viajes para transportar la misma carga.
Sin embargo, dijo que estaban esperando esta regulación, porque mejorará la calidad de vida de los trabajadores, especialmente, de los más jóvenes.
