La oposición manifestó dudas respecto de la capacidad de infraestructura y especialización que tendrá el nuevo Servicio de Reinserción Social Juvenil, entidad que reemplazará al Sename en la atención de menores infractores de ley y que fue aprobado en general por la comisión de Constitución del Senado.

El senador del PPD, Felipe Harboe, destacó que la creación de este servicio es la mayor inversión en democracia para atender a jóvenes infractores de ley con un costo fiscal de 90 mil millones de pesos y la promesa de contar con profesionales especializados para atender a estos menores.

Sin embargo y pese a la votación unánime en la aprobación general en la comisión de Constitución de la Cámara Alta, el senador de la UDI, Hernán Larraín, manifestó sus dudas respecto a la capacidad de infraestructura y la generación de programas especializados para atender a menores infractores de ley.

Por su parte, el senador independiente Pedro Araya, destacó que este proyecto no sólo crea una nueva institucionalidad, sino que también genera modificaciones relevantes a la ley de Responsabilidad Penal Adolescente.

Este proyecto, que será revisado ahora por la sala del Senado para su discusión en general, se suma a otras iniciativas que apuntan a mejorar la protección de la infancia en nuestro país, como una respuesta a la crisis del Servicio Nacional de Menores.