La Corte de Apelaciones de Santiago revirtió la decisión del Octavo Juzgado de Garantía de Santiago, que dejó en libertad al ciudadano peruano Pedro Abad, que se apropiaba de claves bancarias de internet para realizar compras con cargo a sus víctimas, las que fueron afectadas en todo Chile.

El fiscal Oriente Carlos Gajardo explicó que el tribunal de alzada ordenó la prisión preventiva del imputado, quien cometió 18 delitos informáticos y de estafa -según dijo- a través del “phishing”.

Ello le permitía hacerse de las claves a través de páginas en internet, como Facebook, donde generaba publicidad falsa con promociones y concursos para que las personas ingresaran sus datos.

La investigación determinó que la estafa llegaría a los 88 millones de pesos en compras que realizó el indagado.

Gajardo entregó detalles de la forma en que operaba el imputado, que ahora deberá permanecer en prisión preventiva.

En la investigación se determinó que Pedro Abad adquirió productos electrónicos en el extranjero por más de 7 millones de pesos.