Continúan las reacciones luego que se conociera que Sofía Henríquez Bachelet, hija de la presidenta Michelle Bachelet, comprara a su cuñada Natalia Compagnon media hectárea de terreno en las cercanías de donde se iba a construir el proyecto minero Dominga.
Según informó hoy La Tercera, se trata de una transacción realizada días después de que su madre volviera a La Moneda. Es media hectárea de seis que adquirió la mujer de Sebastián Dávalos Bachelet para, aparentemente, realizar proyectos inmobiliarios ante la construcción de la minera cuya resolución ambiental fue rechazada.
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Compagnon es investigada actualmente en el caso Caval, por comprar a través de dicha empresa un terreno en Machalí a $6.500 millones (gracias a un préstamo del Banco de Chile solicitado directamente a Andrónico Luksic) y que luego vendió a $9.500 millones ante la expectativa de un cambio de uso de suelo.
Mario Zumelzu, abogado querellante en dicha causa, se refirió a esta nueva polémica que envuelve a la familia presidencial.
En conversación con La Radio, declaró que “todo lo vinculado a Natalia Compagnon siempre es oscuro, siempre es turbio. Nuevamente estamos ante un tema de especulación inmobiliaria. Se compran terrenos baratos y sujetos a aprobaciones estatales, se pretende obtener un sobreprecio, una ganancia”.
El profesional indicó que esta revelación pone en una difícil situación a la presidenta Bachelet, ya que “de darse la aprobación ambiental al proyecto Doña Dominga, la familia presidencial habrá obtenido una importante ganancia. No solo Compagnon, sino también esta vez su hija Sofía Henríquez Bachelet”.
“Cabe preguntarse cómo una niña de 21 años dispone de $6 millones y medio para comprar un terreno. ¿Qué actividad comercial desarrollaba Sofía Henríquez Bachelet al momento de la compra de estos terrenos? Yo pienso en todo caso que esto amerita una investigación, muy probablemente podríamos estar en presencia de un Caval 2“, cerró.
